¿De qué va?: Un asesino de niñas tiene atemorizada a toda la ciudad. Mientras la policía lo busca desesperadamente, deteniendo a cualquier individuo mínimamente sospechoso, los jefes del hampa, furiosos por las redadas que están sufriendo por culpa del asesino, deciden buscarlo ellos mismos.
Reputación: M, el vampiro de Düsseldorf fue la primera película sonora de Fritz Lang, un año después de que éste se hubiera incorporado al cine. Supuestamente, la película se basa en el caso real de Peter Kürten, un asesino en serie que durante un tiempo mantuvo aterrorizada a la población de Düsseldorf. Sin embargo, Lang lo desmintió tiempo después, alegando que no se había basado en un caso en particular, puesto que en el momento en el que rodó el filme había varios asesinos en activo en Alemania. Peter Kürten fue ejecutado pocos meses después del estreno de la película, y tal vez por ello se le asocie directamente con M. Para interpretar al asesino, Lang escogió al por entonces desconocido Peter Lorre, al que luego se le encasillaría en papeles de villano. En el fragmento en el que su personaje silba fue doblado por Fritz Lang, ya que al actor le resultaba difícil silbar la melodía durante largo rato sin perder aire, mientras que director tenía gran habilidad para ello. Uno de los títulos provisionales de la película fue Una ciudad busca un asesino, y luego pasó a llamarse Un asesino entre nosotros. El título definitivo fue M porque el anterior levantó la susceptibilidad del partido nazi por su posible alusión a su principal dirigente.
Comentario: Nadie puede poner en duda la gran importancia que tiene Fritz Lang en la historia del cine gracias a sus aportaciones a la técnica y narrativa audiovisual. Dicho esto, aviso de antemano que este comentario no va a gustar a los más puristas y a todas mis “almas gemelas” de Filmaffinity que auparon este película a los primeros puestos de mi lista de recomendaciones. Sin dar más rodeos, M, el vampiro de Düsseldorf me ha parecido un severo aburrimiento. Tras un un impactante comienzo, la película “avanza” (es un decir) entre investigaciones que no conducen a ninguna parte y discusiones de policías por un lado y delincuentes por otro que quieren darle caza. Cuando por fin aparece el asesino, el único personaje interesante del filme, la trama mejora aunque su captura se alarga demasiado. Entiendo el retraso que se hace de la sociedad aunque me parece que va un poco justita de coherencia (¿Si hay un asesino de niños suelto por qué los padres siguen dejando que sus hijos anden solos por las calles?). No le resto importancia a sus virtudes y hallazgos, faltaría más, pero M va directa a mi saco de películas sobrevaloradas.
Próximo visionado: Marnie, la ladrona (1964)
1 comentario:
Me encuentro entre los puristas que rechazan tu crítica.
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