Alfred Hitchcock, una de las figuras más fascinantes e influyentes de la Historia del Cine, ha sido el tema principal de dos películas durante este año. Ninguna de las dos es un biopic al uso que abarque toda su vida, sino que se centran en tramos significativos de su trayectoria profesional. Hitchcock, que llegará a los cines españoles el próximo mes de febrero, se centra en el complicado rodaje de Psicosis y en cómo éste afectó a la relación con su esposa, Alma Reville, mientras que The Girl, tv-movie producida por la prestigiosa HBO, examina la relación que mantuvo el cineasta con su última gran musa, Tippi Hedren.
Así, el telefilme nos muestra cómo Hitchcock se fijó en ella por un anuncio de televisión y le hizo firmar un contrato en exclusiva sin que la por entonces modelo tuviera experiencia previa como intérprete. Decepcionado por cómo había terminado su relación con las actrices que habían trabajado a sus órdenes, como Grace Kelly o Janet Leigh, el director decide convertir a Hedren en una estrella desde cero, dándole el efecto inverso al mito de Pigmalión, convirtiendo a la persona en una estatua hecha a su particular medida. Sin embargo, ante la negativa de Hedren de pasar por el aro en determinadas situaciones, el director se las hizo pasar canutas en el rodaje de Los pájaros tanto dentro como fuera del set… O al menos, eso es lo que se nos muestra en el filme.
The Girl es la versión de los hechos según Hedren, porque aunque durante la elaboración del guión se contó con el testimonio de Jim Brown, asistente de dirección y mano derecha de Hitchcock durante varios años, éste falleció el año pasado sin que pudiera ver el resultado, y su esposa rechaza la imagen que se da del cineasta en la ficción. El telefilme define a Hitchcock como un hombre perturbado, atrapado en un matrimonio infeliz y obsesionado con su revelación rubia hasta el punto de querer arruinar su carrera si no lo complacía. La cinta no se anda con chiquitas a la hora de mostrar el lado oscuro del cineasta, hasta el punto de quedar caricaturizado en varias ocasiones.
The Girl se centra exclusivamente en la relación entre Hitchcock y Hedren, pero es una pena que queden relegados a un discreto segundo plano aspectos curiosos del rodaje de sus películas, o el papel que desempeñaba su esposa, Alma Reville. Lo mejor del telefilme es Sienna Miller, una de las actrices más infravaloradas de la actualidad por haber sido uno de los principales focos de atención de la prensa sensacionalista. La actriz está maravillosa en toda la evolución que experimenta su personaje, desde el nerviosismo y el entusiasmo propios de una novata hasta convertirse en una estrella atrapada en una jaula de cristal. Tampoco está mal Toby Jones como Hitchcock, pero le pesa la forma en la que está caracterizado el personaje, bastante plano. En definitiva, se trata de una visión curiosa y parcial de una de las relaciones tormentosas más célebres que se han producido tras las cámaras, pero no sé hasta qué punto podemos creernos todo lo que vemos en la pantalla. Habrá que ver si el Hitchcock que encarna Anthony Hopkins resulta ser más amable y ‘blanco’ que el que aquí se nos presenta.
6/10
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