¿De qué va?: Cuando Zampanó, un artista ambulante, enviuda, compra a Gelsomina, la hermana de su mujer, sin que la madre de la chica oponga menor resistencia. Pese a la actitud violenta y agresiva de Zampanó, la muchacha se siente atraída por su estilo de vida ambulante, sobre todo cuando su dueño la incluye dentro del espectáculo. Aunque varias de las personas que se encuentra por el camino le ofrecen ayuda, Gelsomina demostrará su lealtad a Zampanó hasta las últimas consecuencias.
Reputación: La Strada es una de las películas de Federico Fellini pertenecientes a la etapa más cercana al neorrealismo en la carrera del cineasta. La característica fundamental de este movimiento cinematográfico era la de mostrar la realidad, reflejarla a través de una mirada naturalista y de sencillez temática, contando pequeñas historias que reflejaban la sociedad italiana de la época. Entre los numerosos tiros y aflojas que durante la producción de la película mantuvieron Fellini y el productor Dino De Laurentiis el más importante fue el de la elección de la actriz que encarnara el papel de Gelsomina. Fellini había escrito el papel pensando en su esposa, Giuletta Massina, pero los productores la veían encasillada en papeles de prostituta y preferían a Silvana Magano, mujer de De Laurentiis, y a Maria Pia Casilio. Ninguna de ellas consiguió cuajar en la opinión de Fellini, aunque De Laurentiis aprovechó que Massina sufrió una lesión de tobillo durante el rodaje para poder sustituirla, puesto que aún no habían firmado contrato con ella. Sin embargo, cambió de parecer cuando vio el material filmado, mandando a que la actriz firmara el acuerdo lo antes posible y esperando a que se recuperara, lo cual provocó que el rodaje se detuviera varios meses. Ahí no acaban los percances del rodaje, puesto que para obtener la tonalidad grisácea que luce el filme, el operador utilizaba muchas luces voltaicas, tan intensas que Massina sufrió una lesión ocular y tuvo que llevar uno de los ojos vendados. La Strada fue candidata al Oscar a mejor guión y ganó el premio de mejor película de habla no inglesa, además de obtener el León de Plata del Festival de Venecia.
Comentario: Hablar de La Strada es hablar de Gelsomina, uno de los personajes más entrañables y melancólicos que nos ha dejado la Historia del Cine. Ella es un payaso triste, una mujer apocopada pero afable que se entrega totalmente a su dueño, un hombre tosco, bruto y posesivo que la considera un objeto y no le muestra ni una pizca de afecto. Todas las personas que se cruzan en su camino se percatan de la triste situación de Gelsomina y le ofrecen una alternativa, pero ella ha aceptado su destino a sabiendas de que él no va a cambiar. Soberbia película sobre una historia de amor imposible que cuenta con la desolada Italia de la posguerra como trasfondo y en la que se muestran de forma muy clara algunas de las señas de autor de Fellini, como la importancia del mar. La memorable banda sonora compuesta por Nino Rota pone la guinda de este agridulce pastel.
Próximo visionado: M, el vampiro de Düsseldorf (1931)
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