Dir.: Kevin Macdonald
Int.: Russel Crowe, Ben Affleck, Rachel McAdams, Helen Mirren, Robin Wright Penn, Jeff Daniels, Jason Bateman
¿De qué va?: La misteriosa muerte de la ayudante del congresista Stephen Collins es el punto de partida de una investigación llevaba a cabo por el periodista Cal McCafrrey, que se verá involucrado en una conspiración en la que las motivaciones personales juegan un importante papel.
Opinión: A pesar de haber entrado con fuerza en el ranking de taquilla americano y español, La sombra del poder parece condenada a tener una discreta carrera comercial, pues no es rival para las estrellas juveniles impulsadas por la factoría Disney que acaparan sin problemas los primeros puestos de la clasificación. ¿Significa esto que el futuro del cine está en manos de los ídolos juveniles provenientes de la televisión? Y con esto no sólo aludo a Disney Channel; si saben qué dos películas españolas han llegado este año al nº 1 de la taquilla entenderán de lo que estoy hablando.
De cualquier forma, La sombra del poder (discutible traducción del original, State of Play, es el último añadido a la larga colección de películas que se titulan “La sombra de…”) supone un alivio para el espectador que busque una película que no le tome por tonto y le sumerja durante dos horas en una intriga que, sin ser el “no va más” de los thrillers, cumple holgadamente con sus pretensiones: contar una historia entretenida y llena de suspense que enganche desde el primer momento.
La dirección firme de Kevin Mcdonald nos guía a través de su ágil cámara por una conspiración compleja, no demasiado como para perderse pero tampoco tan simple como para que parezca un chiste, bien explicada sin estar masticada, y con giros de guión sorprendentes a la vez de coherentes. La película está basada en una alabada miniserie británica, aunque al no haberla visto desconozco si todo lo que hace que el film funcione es gracias a aquella o no.
En lo que sin duda no tendrá nada que ver la serie original es con el reparto de la película, que no estuvo exento de problemas durante su formación. El resultado final cierra las bocas de los escépticos que no confiaban en Russell Crowe y en su aspecto descuidado, pues le va ni que pintado para enriquecer su papel, tanto que parece raro que Brad Pitt fuese la primera elección para interpretarlo. Ben Affleck aguanta el tipo con dignidad al lado de Crowe aunque no exista ninguna química entre ambos. Rachel McAdams se desenvuelve con soltura dentro de un grupo de actores veteranos y las pequeñas pero importantes intervenciones de Robin Wright Penn, Jason Bateman y Helen Mirren son estupendas, sobretodo ésta última como la despiadada jefa del periódico está soberbia.
Conspiraciones aparte, La sombra del poder es una película que gira en torno a la profesión del periodista: el modo en el que obtiene sus fuentes, el dilema entre hacer periodismo serio o controvertido, los riesgos que toma, lo complicado que resulta no implicarse en la noticia, el trabajo a contrarreloj, la lucha por conseguir la primicia y el importante descenso que ha sufrido la prensa escrita a favor de Internet. No en vano, en los créditos finales se muestra todo el proceso por el que pasa la creación de un periódico. Clásico y eficaz, como la película que acaba de terminar.
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