Mientras esperamos a que Ridley Scott se decida a hacer la película del Monopoly (sonará a chiste, pero creo que sería muy oportuna para el momento social, político y económico que vivimos), tenemos que conformarnos con otro juego de mesa que da el salto a la gran pantalla, el de Hundir la flota, aunque se ha mantenido su título en inglés para España, Battleship, por lo que puede que no todo el mundo se capisque de sus orígenes. Y es que del juego original poco queda, salvo por los barcos de guerra y la forma en la que los protagonistas deciden atacar a sus adversarios.
Me da la impresión de que el director, Peter Berg, tenía celos de Michael Bay y decidió hacer su particular versión de Transformers. porque Battleship está hecha con el mismo molde que aquélla: metraje abultado, explosiones, humor infantil,tías buenas, más explosiones, espectaculares efectos especiales y más explosiones. Berg recurre a su actor fetiche, Taylor Kitsch (lo descubrió en Friday Night Lighs, serie en la que ejercía de productor), para que ejerza de Shia LaBeouf en su “remedo transfórmico”, en el papel del típico pringado que acaba convirtiéndose sin quererlo ni beberlo en el salvador del mundo. Sin embargo, creo que esta película le hace un flaco favor a la incipiente carrera del actor. El reparto de la película se completa con Brooklyn Decker, la nueva chica florero de moda en Hollywood, con Rihanna en plan marimacho, con Alexander Skarsgard aprovechando como puede la fama que le ha reportado True Blood y con Liam Neeson plenamente satisfecho por haber recibido un abultado cheque sin tener que hacer prácticamente nada.
En lo que respecta a la trama del filme, tras una alargada presentación de personajes llegan los extraterrestres con un look que guarda un sospechoso parecido al visto en videojuegos como el Halo o Mass Effect y todo son ostias, o cañonazos más bien, sin una pizca de emoción o del suspense que se podía haber sustraído del combate estratégico entre naves. Resulta curioso el homenaje que rinden a los veteranos de guerra o la inclusión del heroico personaje lisiado, pero en conjunto no es más que una prima hermana de Transformes ni mejor ni peor; el mismo entretenimiento ruidoso e insustancial.
3/10
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