¿De qué va?: En una estación experimental de la Antártida, un equipo de investigadores descubre a un ente extraño venido del espacio, que según todos los indicios ha permanecido enterrado en la nieve durante más de 100.000 años. Al descongelarse, experimenta una metamorfosis sorprendente…
Reputación: En 1981, tras el inesperado éxito de La noche de Halloween, Universal Pictures le ofreció a John Carpenter hacer un remake de la película El enigma de otro mundo (1951) de la cual el director sentía devoción. Sin embargo, optó por readaptar el relato en el que la misma se había basado, Who Goes There? de John W. Campbell, además de descartar un proyecto que tenía sobre la mesa acerca de un extraterrestre de buenos sentimientos que acabaría siendo el E.T., el extraterrestre de Steven Spielberg. El guión que escribió Will Lancaster, hijo del actor Burt Lancaster, para esta nueva versión resaltaba la paranoia de los personajes al enfrentarse a una criatura que adoptaba la forma de uno de los suyos. Aunque los primeras críticas no fueron del todo positivas, la percepción hacia ella mejoró con el paso de los años hasta convertirla en un clásico de terror de referencia. El mismo año de su estreno se publicó una novela basada en el guión de la película, y en 1991 la editorial Dark Horse publicó cuatro cómics que narraban los acontecimientos posteriores a la película. En 2002 salió un videojuego multiplataforma que también se ambienta después de los hechos del filme. El año pasado se estrenó una precuela de la película con el mismo título y protagonizada por Mary Elizabeth Winstead que no contó con el éxito deseado.
Comentario: Si ya lo dice Glenn Close en la muy recomendable serie Daños y perjuicios: “No confíes en nadie… sobre todo si sospechas que alguien ha sido suplantado por un extraterrestre”. Bueno, esta última parte la he añadido yo, pero es que le viene ni que pintada a los personajes de La cosa, quienes sufren la intrusión de un ser del espacio con una inusitada serenidad que de primeras me choca bastante, aunque puede que la culpa sea del resto de películas de terror, que exageran demasiado las reacciones. La sospecha que circula alrededor de los implicados está muy bien resuelta, no tanto el escenario polar, al que podía habérsele sacado mucho más partido. Los efectos especiales y las escenas truculentas geniales, el enfrentamiento final con el bicho muy simple, pero se subsana con un cierre que por desolador y anticlimático resulta grandioso.
Próximo visionado: Fiebre del sábado noche (1977)
1 comentario:
Cómo mola La Cosa. Y recomiendo a todos el videojuego, casi mejor que la peli.
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