La fiera de mi niña

Dir.: Gary Ross
Int.: Jennifer Lawrence, Josh Hutcherson, Liam Hemsworth, Elizabeth Banks, Woody Harrelson, Stanley Tucci, Lenny Kravitz, Wes Bentley
¿De qué va?: Panem está constituida por 12 distritos estrictamente controlados por el Capitolio, el cual organiza cada años los Juegos del Hambre, una competición televisada en la que un chico y una chica de cada distrito es enviado a combatir a muerte hasta que sólo quede uno vivo. Katniss Everdeen, una joven del distrito 12, decide presentarse voluntaria para sustituir a su hermana en los juegos.

Reseña: Desde el ‘boom’ que se produjo al estrenarse la primera película de Harry Potter, todos los grandes estudios de Hollywood han ido a la caza de un filón literario juvenil al que poder explotar, y es que no hay nada mejor que contar con una saga cinematográfica destinada especialmente al target más consumista, los adolescentes. Sin embargo, salvo por Harry Potter, Crepúsculo y si acaso Las crónicas de Narnia, el resto se ha quedado a la deriva, quizás por un problema de saturación del mercado, o porque simplemente lo que atrapa en una lectura no siempre seduce en la gran pantalla. Con el mago de Hogwarts finiquitado y Crepúsculo a punto de concluir (¡al fin!) ya tenemos a la nueva ‘gallina de los libros de oro’: Los juegos del hambre.

La novela de Suzanne Collins cuenta con una prosa llana y limpia, muy fácil de leer, pero es gracias a su mezcla de elementos reciclados de la ciencia ficción con otros a los que les da un giro de tuerca lo que hace a la novela especialmente adictiva, además de la caracterización de su protagonista, Katniss Everdeen, a la que acompañamos en todo momento puesto que la historia está contada en primera persona. También cuenta con un estilo muy cinematográfico, por lo que no me extrañaría que su escritora pudiera estar pensando en el salto a la gran pantalla mientras redactaba el manuscrito. El guión que han escrito a seis manos el director, Gary Ross, Billy Ray y la propia Collins sigue las líneas maestras de la novela a pies juntillas, sin pasar por alto los acontecimientos clave del texto.

Hasta ahí nada que objetar. Sin embargo, al comprimir tanto la historia se pierde, en primer lugar, una mayor profundización de los personajes. Ya lo sé, soy consciente de que una película no puede recoger todo lo que aparece en la novela, pero con la introducción de algunos detalles, alguna línea de diálogo o un simple gesto que nos dejara entrever la evolución que experimenta Haymitch (Woody Harrelson) o el conflicto moral que tiene Katniss durante la celebración de los juegos, me hubiera quedado más que satisfecho. El otro problema a raíz de la compresión es que los juegos parecen mucho más fáciles y se pierde toda esa sensación de supervivencia extrema que transmitía la lectura de la novela. También hay en el filme ciertas cosas que quedan un tanto en el aire para los que desconozcan el material del que parte.

En el apartado en el que no guardo ninguna queja es en el interpretativo, pues todos los actores clavan a sus respectivos personajes. Jennifer Lawrence es una Katniss perfecta, ninguna otra podría haberse ajustado tanto al papel. Josh Hutcherson también convence como Peeta y Liam Hemsworth se queda en el banquillo esperando a un considerable aumento de protagonismo en la continuación. De la galería de secundarios curtidos destacaría a Woody Harrelson, aunque como ya he dicho su personaje pierde bastante en comparación con la novela, y una ajustada Elizabeth Banks que esquiva con elegancia los excesos con los que podría haber encarnado a Effie Trinket.

La dirección de Gary Ross no es tan buena como esperaba, las escenas de acción están horriblemente realizadas con una cámara en constante movimiento que impide que veamos lo que está ocurriendo y de paso que la violencia implícita sea un visto y no visto. En definitiva, estos juegos del hambre me han dejado una sensación agridulce pero no hay que olvidar que en realidad se trata de un preámbulo de la historia de Katniss, el desencadenante de todo lo que ocurrirá después, así que habrá que ver si En llamas, la segunda parte, toma un mejor carril bajo la dirección de Francis Lawrence (Agua para elefantes, Soy leyenda). Y que la suerte esté siempre de nuestro lado.

6’5/10