O.C: Cayo Largo (1948)

¿De qué va?: Frank McCloud es un veterano de guerra que viaja a Cayo Largo, una isla de Florida, para visitar al padre y a la viuda de un compañero muerto en combate. Pero su estancia se complica, ya que en su hotel también se aloja una banda de gángsters, que, aprovechando una fuerte tormenta, los toman como rehenes.

Reputación: Cayo Largo está inspirada en la obra teatral homónima del poeta y novelista norteamericano Maxwell Anderson. Sin embargo, los guionistas Richard Brooks y John Huston (también director) modificaron algunas partes, por ejemplo, el protagonista pasó de ser un exiliado de la guerra civil española a un veterano de la 2ª Guerra Mundial, el personaje de la viuda encarnado por Lauren Bacall cobró importancia, y el enfrentamiento final en el yate se sacó de la novela de Tener y no tener que no fue usado para su adaptación cinematográfica. Huston abordó el proyecto justo después de terminar El tesoro de Sierra Madre, coincidiendo ambas en la ceremonia de los Oscar de 1949. Mientras que esta última ganó tres estatuillas, incluyendo mejor director, Cayo largo recibió la única a la que aspiraba, la de mejor actriz de reparto para Claire Trevor. El personaje del gángster Johnny Rocco se basó en la figura de Al Capone y cuenta con detalles biográficos de otro mafioso célebre, Lucky Luciano, así como el personaje de su novia, Gaye Dawn, se asemeja al de la novia de este último, Gay Orlova. El filme está protagonizado por Humphrey Bogart y Lauren Bacall, quienes también fueron pareja en la vida real. Fue su cuarta y última película juntos, pues a pesar de que años después se planeó una quinta colaboración, la muerte de Bogart truncó los planes.

Comentario: Cayo Largo es todo lo que puedes esperar de una película de John Huston y Humphrey Bogart, ni más ni menos, y no es poca cosa. A saber: dirección clásica y elegantísima, un guión potente y compacto, una galería de personajes interesantes encarnados por intérpretes de alto calibre, Bogart haciendo de Bogart, un tenso suspense y el inconfundible e intenso aroma del cine negro. Al desarrollarse prácticamente toda la acción en el salón de un hotel y, en el último acto, en un yate, la claustrofobia reina en el ambiente y la acción se desarrolla a través de la interacción de los diferentes personajes, al tiempo que se reflexiona de temas como la culpabilidad del Estado en la aparición de las mafias, la visión pesimista del mundo de aquel que ha presenciado los horrores de la guerra, la idealización de la figura del héroe o la fuerte influencia del sentimiento del deber.

Próximo visionado: La ley del silencio (1954)