Todos estaremos de acuerdo en que las películas son vehículos de diversión y entretenimiento, al fin y al cabo son historias contadas a través de secuencias en movimiento. Algunas están vacías, son una simple distracción, pero muchas otras nos intentan hacer llegar un mensaje que viene adjunto al desarrollo de su historia. Algunas de estas "fábulas" son ingeniosas, otras nos las conocemos de memoria, pero sobretodo hay que tener cuidado con las que nos intentan colar de forma subliminal, poniendo todas sus cartas a favor para ganarse tu simpatía por muy polémico que sea el tema. Dos de las últimas grandes películas comerciales que han llegado a los cines son un buen ejemplo. Su principal función es entretener al gran público, pero ¿nos intentan vender también una mitipropiedad?
La extraña que hay en ti: El tema es sin duda espinoso: Una mujer a la que han atacado brutalmente y que a su vez han asesinado a su prometido, tras sentirse totalmente aterrorizada en su propia ciudad, decide comprarse una pistola y tomarse la justicia por su cuenta. La evolución del comportamiento de la protagonista está perfectamente explicada gracias a la pericia tras la cámara del director Neil Jordan (Entrevista con el vampiro) y a la interpretación de la gran Jodie Foster.
El viaje que realiza la atípica heroína resulta absorbente y en cierto modo simpatizas con su causa, como en cualquier otra película de venganza que se precie. Sabes que lo que hace está mal, pero la comprendes. El problema llega cuando finaliza la película y te das cuenta de que es un vehículo que defiende la acción de tomarse la justicia por cuenta propia. Y si no es así algo falla, porque resulta algo muy obvio.
Moraleja: Si quieres un trabajo bien hecho, no dejes que los demás ejerzan de jueces, hazlo tú mismo.
***
Soy leyenda: El que fue el grán éxito de las Navidades pasadas está protagonizado por el único actor de la actualidad que supone un seguro en taquilla: Will Smith. En esta ocasión, interpreta al único hombre que vive en Nueva York tras el desastre provocado por un virus propagado por el mundo entero que ha convertido a la civilización en extrañas criaturas similares a los vampiros.
Aunque Smith esté sólo casi todo el tiempo en pantalla tiene el suficiente carisma como para mantener el tipo y no aburrir en ningún momento, aunque también es verdad que cuenta con el apoyo de su perro, formando una relación de lo más sólida y conmovedora. Las escenas de acción y suspense están muy logradas, aunque se abusa demasiado de los efectos digitales, sobretodo en la creación de las criaturas nocturnas.
Es en el último tramo de la cinta en cuando aparece un giro que cambia las bases de la cinta para incluir un mensaje revelador: Nunca hay que perder la fe. Lo de lo peligrosos que pueden ser los avances médicos y científicos podría haber colado, pero el tono religioso del final arqueará más de una ceja. A pesar de esto, sigue siendo un blockbuster con honores.
Moraleja: Por muy mal que se ponga la cosa por culpa de la investigación científica nunca jamás se debe perder la fe.
***1/2
Conclusión: Aunque contengan mensajes cuestionables, nunca hay que olvidar que el cine es ficción. La extraña que hay en ti y Soy Leyenda son entretenimientos de primera, mientras no se tomen en serio, son totalmente disfrutables.
La extraña que hay en ti: El tema es sin duda espinoso: Una mujer a la que han atacado brutalmente y que a su vez han asesinado a su prometido, tras sentirse totalmente aterrorizada en su propia ciudad, decide comprarse una pistola y tomarse la justicia por su cuenta. La evolución del comportamiento de la protagonista está perfectamente explicada gracias a la pericia tras la cámara del director Neil Jordan (Entrevista con el vampiro) y a la interpretación de la gran Jodie Foster.El viaje que realiza la atípica heroína resulta absorbente y en cierto modo simpatizas con su causa, como en cualquier otra película de venganza que se precie. Sabes que lo que hace está mal, pero la comprendes. El problema llega cuando finaliza la película y te das cuenta de que es un vehículo que defiende la acción de tomarse la justicia por cuenta propia. Y si no es así algo falla, porque resulta algo muy obvio.
Moraleja: Si quieres un trabajo bien hecho, no dejes que los demás ejerzan de jueces, hazlo tú mismo.
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Soy leyenda: El que fue el grán éxito de las Navidades pasadas está protagonizado por el único actor de la actualidad que supone un seguro en taquilla: Will Smith. En esta ocasión, interpreta al único hombre que vive en Nueva York tras el desastre provocado por un virus propagado por el mundo entero que ha convertido a la civilización en extrañas criaturas similares a los vampiros.Aunque Smith esté sólo casi todo el tiempo en pantalla tiene el suficiente carisma como para mantener el tipo y no aburrir en ningún momento, aunque también es verdad que cuenta con el apoyo de su perro, formando una relación de lo más sólida y conmovedora. Las escenas de acción y suspense están muy logradas, aunque se abusa demasiado de los efectos digitales, sobretodo en la creación de las criaturas nocturnas.
Es en el último tramo de la cinta en cuando aparece un giro que cambia las bases de la cinta para incluir un mensaje revelador: Nunca hay que perder la fe. Lo de lo peligrosos que pueden ser los avances médicos y científicos podría haber colado, pero el tono religioso del final arqueará más de una ceja. A pesar de esto, sigue siendo un blockbuster con honores.
Moraleja: Por muy mal que se ponga la cosa por culpa de la investigación científica nunca jamás se debe perder la fe.
***1/2
Conclusión: Aunque contengan mensajes cuestionables, nunca hay que olvidar que el cine es ficción. La extraña que hay en ti y Soy Leyenda son entretenimientos de primera, mientras no se tomen en serio, son totalmente disfrutables.
1 comentario:
soy leyenda es una peli buenisima!!!!!es lo maassss!!!XDXDXDXDXDXD
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