¿De qué va?: Dos policías de narcóticos de la ciudad de Nueva York, Jimmy ‘Popeye’ Doyle y Buddy ‘Cloudi’ Russo, siguen la pista de una red de narcotráfico. La intuición del primero les lleva a investigar la presunta llegada de un cargamento de heroína proveniente de Marsella, organizado por el traficante francés Alain Charnier y su contacto americano, Sal Boca.
Reputación: The French Connection, cuyo título proviene de un plan urdido por mafiosos corsos para introducir droga en Estados Unidos durante la década de los 60 y 70, es una película dirigida por William Friedkin basada en un libro de Robin Moore que relata las experiencias reales de dos detectives del departamento de narcotráfico que, gracias a su innovador estilo realista y moderno, gozó de una gran popularidad en su época, alzándose como la gran triunfadora de la 44º edición de los Oscar con los premios a la mejor película, director, actor principal, guión adaptado y montaje, aunque son muchos los que piensan que ese año había otro filme mejor en la terna, La naranja mecánica. La película lanzó a la fama a su carismático protagonista, Gene Hackman, quien cuatro años después protagonizaría una secuela dirigida por John Frakenheimer. En lo que respecta a Friedkin, en 1973 rodó su película más popular, la terrorífica El exorcista, y aunque actualmente sigue en activo (tiene pendiente de estreno Killer Joe con Matthew McConaughey y Emile Hirsh) su carrera ha ido en declive con los años.
Comentario: The French Connection es uno de esos thrillers policiacos en los que tienes que estar muy atento a lo que ocurre desde el principio, quedarse con las caras de los personajes y sus nombres, porque aunque la trama nunca se torne excesivamente complicada no es de las que lo dejan todo masticado. Descubrimos la historia y a los personajes por los propios acontecimientos más que por los diálogos, sobre todo en lo que concierne al protagonista, Popeye Doyle, uno de esos tipos rudos y perseverantes que tanta simpatía generan. La película está rodada con un estilo documental que le aporta verismo aunque a veces se vuelva un tanto monótona, con demasiadas persecuciones, aunque sea precisamente la que se produce a través de unas vías de tren lo mejor del conjunto. Eso sí, tiene uno de los finales más abruptos que recuerdo haber visto.
Próximo visionado: La tumba de las luciérnagas (1988)
No hay comentarios:
Publicar un comentario