El título original de La lista, Deception, define perfectamente mi estado de ánimo cuando vi aparecer los créditos finales en la pantalla. Decepción ante un filme con ínfulas de thriller erótico de altos vuelos que se queda en carne de telefilme auspiciado por sus dos estrellas protagonistas, a saber qué fue los que les atrajo de semejante proyecto.
El desconocido Marcel Langenegger se encarga de que los ambientes sórdidos y elegantes donde un triste hombre gris descubre los placeres del sexo anónimo gracias a un selecto club secreto queden plasmados de la forma más “erótico light” posible, mostrando un poco de chicha pero no demasiada, casi como si se tratara de un anuncio de lencería femenina. Mientras tanto, la historia sigue su previsible rumbo con giros de guión que se ven venir desde la presentación de los personajes. Y salvo un risible acto final ambientado en la ciudad de Madrid, poco más que destacar.
Ni siquiera sus dos protagonistas y principales reclamos, Ewan McGregor y el sex-symbol en ciernes Hugh Jackman, son capaces de insuflarle a la cinta una pizca de emoción o suspense. La sensualidad de Michelle Williams es lo único salvable, pero me gustaría que no la desperdiciara en productos que guarden tantas semejanzas con lo que suelen emitir las cadenas de televisión en las sobremesas del fin de semana.
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2 comentarios:
Menos mal que leí tu reseña porque casi casi que la veía esta semana! Ni me gasto entonces porque tenía mis dudas, no sé porqué me la imaginaba así. Es que McGregor no es un actor que me agrade mucho, pero Jackman me encanta!...
Normalmente animo a la gente a ver las películas que han recibido opiniones negativas si de verdad les interesan, porque no siempre hay unanimidad en cuanto a lo que le gusta a cada uno.
Pero en este caso dudo que le pudieras encontrar algo positivo, la mayoría de críticas y opiniones que he leído son similares a la mía.
Un saludo!
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