O.C: The Rocky Horror Picture Sow (1975)

¿De qué va?: Janet y Brad son una pareja de prometidos que de camino a reunirse con un viejo amigo se les estropea el coche, por lo que se refugian en un castillo cercano. Allí conocerán al Dr. Frank-N-Furter, que está construyendo una especie de Frankestein, el hombre perfecto para tener sexo.

Reputación: Yo diría que se trata del prototipo de película de culto por excelencia: rodada con cuatro duros, pasa desapercibida en su estreno por su estética y argumento frikis, pero con el tiempo va ganando adeptos hasta que la devoción es tanta que se organizan proyecciones a los que la gente acude disfrazada y en donde se montan auténticas fiestas. Basada en el musical The Rocky Horror Show de Richard O’Brien, tiene una secuela titulada Shock Treatment (1985) que también fue dirigida por el mismo realizador, Jim Sharman, aunque no gozó ni de lejos de la popularidad de su predecesora. Tampoco contó con el reparto original, en el que destacan una jovencita y descocada Susan Sarandon y Tim Curry, interpretando al icónico científico travesti Frank-N-Furter, el papel más reconocido de su carrera junto al payaso asesino de It.

Comentario: Partiendo del hecho de que es una película que puede provocar sentimientos radicales, o la amas o la detestas, me voy a situar en un término medio. Algunas escenas me han parecido algo incomprensibles, en algún momento rozando el ridículo, pero luego no he podido evitar rendirme al son de la música en números como el Time Wrap, mi favorito de todo el filme junto al hilarante Dammit, Janet. Es tan marciana como sus propios personajes, que invitan al desenfreno y a la revolución sexual con un desparpajo muy cachondo. No es apta para todos los paladares y puede que la primera impresión que cause sea rechazo, pero de verdad que creo que es una de esas películas que hay que ver porque ofrecen algo radicalmente diferente a lo que estamos aclimatados a ver, y sin llegar al extremo cafre de Pink Flamingos.

Próximo visionado: La costilla de Adán (1949)