¿Quién puede matar a una niña?

Dir.: Gavin Hood
Int.: Helen Mirren, Aaron Paul, Alan Rickman, Barkhad Abdi, Iain Glen, Phoebe Fox,, Richard McCabe, Jeremy Northam, Monica Dolan
¿De qué va?: La coronel Katherine Powell es una oficinal de la inteligencia militar británica al mando de una operación para capturar a unos terroristas en Kenia, pero cuando se da cuenta de que el objetivo está planeando un ataque suicida inminente, cambia sus planes de ‘atrapar’ por ‘aniquilar’. Sin embargo, la presencia de una niña de nueve años en la zona de impacto del misil provocará una disputa internacional sobre las implicaciones de la guerra moderna.

Reseña: Ningún ciudadano de a pie puede tener una visión global de cómo funciona la lucha contra el terrorismo hoy en día, pero gracias a productos audiovisuales como Homeland o Citizenfour nos podemos hacer una idea bastante aproximada del mundo hipervigilado en el que vivimos, uno en el que Occidente pone todos sus esfuerzos para contener el Mal en Oriente, para que los atentados bomba y los “terroristas infiltrados entre las mareas de refugiados” no logren traspasar las fronteras. Espías desde el cielo no desvela nada que no sepamos ya aquellos que seguimos las aventuras de Carrie Mathison sobre cómo funciona la actual caza al terrorista, pero como thriller bélico comercial y de denuncia el resultado es bastante meritorio.

Espías desde el cielo expone, sin prisa pero sin pausa, los diferentes puntos de vista desde los que presenciaremos la acción, así como la construcción del conflicto moral sobre el que girará la trama cuando todas las piezas estén colocadas en el tablero. Sin embargo, la película acarrea una contrariedad bastante gorda que, de no dejarla pasar, puede hacer que todo el conjunto se desmorone: en la vida real, ningún alto cargo se plantearía abortar una misión que acabaría con cinco terroristas de cuajo por un daño colateral en forma de niña inocente. ¿Cuántos ataques de fuerzas militares europeas o americanas se habrán producido ya en los que hayan muerto cientos de personas, desde niños hasta ancianos? No obstante, si hacemos ese pequeño esfuerzo de suspensión de incredulidad, la película nos recompensa con creces.

Porque el film de Gavin Hood es bastante hábil a la hora de evidenciar que las guerras de hoy en día se combaten vía satélite desde oficinas y despachos. Una maraña burocrática en la que una decisión de vital importancia debe ser tomada por un señor que está en el otro extremo del planeta jugando una partida de tenis, y en la que el que debe apretar el gatillo es un chaval que está en la otra punta del mundo trabajando como piloto de drones para poder pagar los préstamos universitarios. Todo bajo el control de una coronel (fantástica Helen Mirren) que no tiene reparos en infringir las normas por las que se rige y coaccionar a sus propios subalternos con tal de cumplir sus objetivos estratégicos.

Espías desde el cielo es un thriller cuya buena parte de tensión se cuece, y muy bien, a través de conversaciones vía Skype o teléfono. No hay soluciones ni respuestas fáciles o categóricas en la lucha contra el terrorismo, y el film, aun simplificando el debate, muestra las diferentes posturas sin posicionarse claramente a favor de ninguna. Sin embargo, hay una cariz que habría sido interesante explorar desde la perspectiva del personaje del tristemente fallecido Alan Rickman: ¿Y si en vez de una niña keniata hubiese sido americana o británica?

7’5/10